Capitulo 34

Una de las siluetas comenzó a acercarse a ellos, acompañada por el chirriar de piezas mecánicas, un robot, probablemente de los regentes, Phineas puso su RCTT de modo que Isabella no quedara expuesta a los enemigos que encontraron, y comenzó a buscar en la maleta más grande algo, saco de allí una de las Ultimatetool del Almirante Flynn y apunto con ella a los ocupantes del tren.

-¡Aléjense!, no les permitiré que le pongan un solo dedo encima- dijo con valor, pero Isabella lo podía sentir temblando de miedo por el hecho de estar apuntando un arma a un desconocido, ella se abrazo con más fuerza a él mientras el sonido mecánico de aquella silueta comenzaba a avanzar al frente, Phineas tomo con más determinación el arma y su dedo sujeto firmemente el gatillo dispuesto a disparar a la menor señal de agresión, entre la luz cegadora del interior de la locomotora poco a poco pudieron ver que el dueño de la silueta era…

-¿¡Perry!?- Dijeron los dos al mismo tiempo al ver a Perry convertido en una maquina viviente, un cyborg, y se escucho desde atrás de Perry.

-Supongo que eso significa que ya son novios oficialmente- dijo esa voz fuera de cuadro, Phineas miro a Isa y ella le sonrió un tanto sonrojada, giro y apunto más decidido y firme que antes a aquella silueta, un extraño cuervo se metió en la locomotora como si se tratara de un lugar familiar para él, justo en el lugar exacto donde pudo cubrir la fuente de luz lo suficiente para que vieran quienes eran los que estaban dentro.

-¿¡Ferb!?- Dijeron Phineas e Isabella al mismo tiempo.

-Y no está solo- dijo Laurence saliendo a un lugar donde lo pudieran ver sus hijos seguido de Jeremy, Linda y las exploradoras, Phineas e Isabella no podían creerlo.

-Nos costó mucho trabajo encontrarlos, los barcos de la armada de los siete mares no siguen una ruta que sea fácil de seguir- dijo Ferb mientras ponía una escalera para bajar donde ellos, Phineas e Isabella estaban sorprendidos y felices de verlos, aunque estaban en Shock al ver a su familiares allí.

-¿Cómo es que pudieron seguirnos?- pregunto Phineas sorprendido.

-Después de que los secuestraron, Ferb no paró hasta terminar el portal para poder llegar aquí- dijo Laurence mientras bajaba con un torpe  salto del tren, Phineas no podía creerlo, su hermano es grandioso, si no fuera por el quizás se habrían quedado perdidos para siempre en este mundo.

-Bien, es hora de irnos- Dijo Jeremy mientras regresaba al interior de la locomotora, finalmente estaban a salvo, Ferb abrió una rampa por donde subieron el RCTT al tren, una vez arriba Phineas e Isabella bajaron del robot que les había servido de transporte, al bajar Isa encontró la mano de Phineas esperándola, ella la tomo y los dos caminaron al frente del tren, al llegar a la locomotora el reencuentro con sus amigos fue emotivo, las chicas corrieron a abrazar a Isabella y dejaron salir lagrimas de alegría por encontrarla sana y salva, Laurence acaricio la cabeza de su hijo felicitándolo por haber protegido a Isabella y haber podido escapar de los peligros, Ferb, solo levanto un pulgar al ver a su hermano sano y salvo y después fue con Isabella, al estar frente a ella él la abrazo y le dijo.

-Cuida bien de mi hermano cuñada- Isabella se avergonzó pero estaba feliz de escuchar a Ferb confiándole a su hermano, pero faltaba alguien importante, la mama de Phineas había estado al margen del reencuentro, mirando a su hijo desde lejos, estaba Linda sin saber qué es lo que tendría que hacer, ¿Lo castigaría? ¿Lo regañaría? ¿Qué es lo que ella va a hacer? Pero ve acercarse a su hijo tomado de la mano de Isabella, al verlos juntos, camino donde ellos, y los abrazo fuertemente.

-Gracias al cielo que están bien- dijo linda conteniendo las lagrimas de verlos sanos y salvos, Phineas e Isabella se abrazaron a ella –Estaba tan preocupada por ustedes, ¡prométanme que nunca harán algo tan peligroso otra vez!- ella se separo de su hijo y el pelirrojo termino el abrazo.

-Nunca permitiría que algo malo le pase a las personas que quiero- dijo con su acostumbrado tono de voz, Jeremy los veía, quizás con algo de nostalgia o envidia de que sean una familia tan unida.

-Es hora de irnos, ¿harías los honores Ferb?- dijo el chico rubio mientras señalaba a Ferb el control de la locomotora, sin saber de dónde, Ferb se había puesto un uniforme completo de maquinista y levantaba el pulgar, subió a una silla donde podía sacar la cabeza en una ventana a un lado para ver al exterior y el tren comenzó a avanzar lentamente.

-Y… ¿adónde exactamente nos dirigimos?- pregunto el peli-verde.

-Es verdad- Dijo Gretchel que se había parado junto a Ferb –cuando encontramos este tren abandonado en Danville supimos que sería el mejor modo de salir de allá con los refugiados, ¿pero a donde vamos ahora?- Todos los que se habían quedado atrás en Danville se miraron uno al otro, ninguno de ellos sabia que hacer, simplemente habían salido con el propósito de encontrar a “Phinbella” pero no sabían qué hacer después de eso.

-Bien, Ferb toma esto- Dijo Phineas mientras le entregaba el nuevo “lindometro” a Ferb –solo sigue la señal de la almirante Isabella y mandaran un barco por nosotros- dijo Phineas mientras el peli-verde veía la señal del “lindometro” sin más que decir, Ferb obedeció a su hermano y comenzaron el viaje, aunque un pasajero no parecía estar muy contento con el hecho de la partida, y era ni más ni menos que el cuervo que se había metido, comenzó a aletear y Ferb tuvo que agacharse para dejarlo salir por la ventana donde él estaba, después de salir por la ventana el cuervo gano altura y se alejo del tren que avanzaba rápidamente en la misma dirección que él, antes de dar tres aleteos el cuervo comenzó a convertirse en bruma nuevamente y desapareció en el aire.

Mientras tanto en el barco insignia de la armada de los siete mares.

Los almirantes estaban en la enfermería muy preocupados por Marie, que aun continuaba desapareciendo si no la tomaban de la mano, mientras que Adyson seguía sosteniendo la pequeña flama de la esperanza muy preocupada por Date en una cama enfrente de Marie mientras el médico y sus enfermeras miraban impotentes sin poder hacer nada, de repente, el escalofrió corrió por las espaldas de todos los presentes, una bruma negra se formo frente a todos y esta comenzó a tomar forma humana, era Isaac.

-Está hecho, hemos encontrado a la pequeña Isabella y todo debe de estar bien pronto- dijo el viajero mientras con su báculo jalaba una silla para sentarse, estaba agotado, pero el almirante Flynn al verlo le pregunto.

-Si todo está solucionado ¿Por qué Marie aun está desapareciendo?-

-Los ríos del tiempo no son fijos, cambian, se retuercen y giran sobre si-

-Sin adivinanzas Viajero- dijo la Almirante Isabella mientras sostenía la mano de Marie.

-Tardara un poco, los cambios en la historia no son tan instant…- antes del que el viajero terminara de hablar Marie se levanto agitada y libre de todo signo de lo que había vivido, era tal cual la recordaban, los almirantes la vieron y sin dudarlo se abrazaron de ella llenos de alegría.

-¡Marie!- Gritaban ellos mientras la apretaban fuertemente entre sus brazos.

-Hugrr, Mama, Papa de la otra dimensión… me están asfixiando- dijo Marie con el poco aliento que le dejaban, los almirantes la soltaron un tanto apenados, la almirante seco sus ojos (no es que ella lo necesitara según sus propias palabras) y tomo a Marie de los hombros.

-¡Nunca más vuelvas a jugar con el delicado equilibrio del espacio tiempo! ¿¡Entendido señorita!?- dijo la almirante muy metida en su papel de madre.

-Está bien mama de la otra dimensión, ¿me perdí de algo mientras dormía?- Marie voltea a todos lados sin saber porque todos la ven tan aliviados -¿de qué me perdí?- dijo tiernamente antes de ser encerrada en los brazos de los almirantes, mientras Isaac miraba la escena de esos tres, giro su cabeza a donde Adyson, cansada hasta el agotamiento de sostener la llama sobre el cuerpo de Date, el había dejado de desaparecer también, pero estaba seriamente herido, y la flama de la esperanza bailaba alegremente entre las manos de la exploradora, Isaac se levanto y camino donde sus compañeros de viaje, cuando estuvo cerca de ellos puso su gris mano sobre el hombro de Adyson.

-Es suficiente, ya has quitado toda la energía obscura de su interior, puedes dejarme a mí el resto- pero la exploradora pareció no escucharlo, estaba muy concentrada mirando la flama sobre sus manos, pero hablo como si ella estuviera metida en un profundo trance.

-No puedo, aun hay energía obscura alimentando la llama- Isaac tomo el faro de la esperanza y lo inclino sobre la exploradora, la blanca luz del Faro lo dejo ver que era verdad, la llama aun se alimentaba de energía obscura, que salía del interior de Adyson.

-*Esto es más serio de lo que pensaba*- dijo Isaac en su mente al ver eso.

-Permíteme pequeña Adyson, es hora de sanarlo- Adyson se recargo en la silla donde estaba aun con la pequeña flama en sus manos, Date estaba muy herido, pero no habían podido atenderlo por estar constantemente desapareciendo en el aire, allí Isaac soltó el Faro de la esperanza y este se quedo flotando en el aire, el impuso sus dos manos sobre él y comenzaron a brillar, las heridas comenzaron a desaparecer rápidamente como si se evaporaran, a pesar de la gravedad de las heridas estas se esfumaban sin dejar cicatrices, al llegar al enorme hueco del proyectil donde se podía ver el latir del corazón de Date, este tardo mucho en sanar, lentamente los huesos se comenzaban a acomodar en su lugar y los tejidos dañados comenzaban a crecer, lo cual no era para nada indoloro, Date que había estado inconsciente la mayor parte del tiempo y parecía haber despertado y se retorcía frenéticamente sobre la cama mientras el viajero lo sanaba, las enfermeras que parecían haberse fundido en la pared del miedo de ver aparecer a Isaac en medio de humo negro, reaccionaron al ver a su paciente sufriendo tan fuertes y terribles dolores, fueron a tratar de sujetarle las piernas y los brazos al paciente, pero Isaac levanta el rostro y sus ojos brillan espectralmente asustándolas de nuevo, el médico que había visto antes a Date miraba todo como perdido en otro mundo.

-Haaaa así es que así fue como sobrevivió… me parece lógico- dijo el galeno mientras se comenzaba a mover fuera de su enfermería con pasos rígidos como los de un robot, los almirantes habían cubierto los ojos y oídos de Marie mientras observaban el método de sanación del viajero.

-¿Qué? ¿¡Que está pasando!?- preguntaba Marie sin obtener respuesta.

Uno de los pies de Date golpeo la pared de metal, los gruesos remaches saltaron y las laminas se torcieron y volaron del otro lado, dejando al médico parado en seco en el pasillo de afuera, su enfermería ahora tenía una ventana interior.

-He tenido pacientes mas cooperativos viejo amigo, ¡tranquilízate! que aun tienes la armadura del almirante y puedes destrozar el lugar con mucha facilidad- Pero Date no se tranquilizaba, su mente consiente no era la que lo obligaba a hacer esas cosas, su cuerpo reaccionaba solo al dolor y no había modo de calmarlo, la dura cama de metal donde estaba acostado había comenzado a desprenderse de la pared con los violentos espasmos de Date, Adyson que aun tenia la llama encendida en sus manos, se levanto con la mirada en blanco, sin el brillo usual en sus verdes ojos, camino junto a la cama de Date y cuando él se sujeto del colchón, ella dejo la llama en su mano izquierda y con la derecha tomo la de Date, como si fuera un zombi o si estuviera bajo el efecto de un extraño hechizo, ella apretó suavemente la mano de aquel sujeto y dijo.

-Tranquilo querido… estoy aquí… vas a lastimar a alguien si no te comportas- Isaac miraba a la exploradora sin saber de qué modo decirle imprudente, Date no la podría escuchar y mucho menos se tran…

-¡Que sorpresa!- Dijo Isaac al ver a Date apretando los dientes y esforzándose por detener los espasmos de su cuerpo, Adyson logro que Date reaccionara y dejara a Isaac terminar con su trabajo, aunque él no parecía muy complacido con el modo como ellos se comportaron.

-*Es terrible el modo como ellos se han conectado, no debía ser así, algo paso, el destino los está llamando con desesperación para cumplir su encuentro destinado, ¿Qué terrible mal caerá sobre ellos?, y lo que es peor, esta pequeña Adyson fue contaminada con energía obscura aprovechando que está emocionalmente agotada por lo que ha estado viviendo estos días, lo más probable es que si no puedo sanar la obscuridad que la invade, tendré que borrarle la memoria*- Pensaba Isaac al ver a esos dos en esa situación, finalmente la herida de Date había comenzado a cerrar, hasta que estuvo completamente sanada, Isaac tomo el faro de la esperanza y vio a Date que había caído nuevamente inconsciente, víctima del trauma de una curación que en un humano ordinario habría sido imposible de realizar, miro donde los almirantes y declaro.

-He terminado, el se recuperara pronto, pero les recomiendo que le quiten la armadura del almirante si no quieren que en una pesadilla destroce el barco desde dentro, los Isabella y Phineas de la otra dimensión vienen para acá con un grupo de refugiados de Danville en el rumbo 2.9,0,0 manden un barco para encontrarlos- dicho eso el viajero puso su mano sobre la cabeza de Adyson

–Regresare pronto, si mi aliado despierta, desearan haberle quitado la armadura del almirante si no ve a Adyson, procuren tener a la mayor cantidad de soldados que puedan para detenerlo el tiempo suficiente para que le expliquen que paso con ella, no tardare, iremos al punto de encuentro y con mi faro guiare a la nave que mandaran para el encuentro con sus alternos-  sin más palabras de por medio, Isaac se rodeo de una bruma negra llevándose a Adyson con él, Los almirantes, el médico y las enfermeras se quedaron pasmados al ver que se la llevaba sin darles una explicación, ¿que pretendía el viajero al llevársela?.